Conversando con Dios

Publicado por - en

Conversando con Dios

PARA MEMORIZAR

“Yo no quiero la muerte de nadie. ¡Conviértanse, y vivirán! Lo afirma el Señor Omnipotente” (Ezequiel 18:32)


Sábado 22 de Noviembre del 2003


UN VISTAZO A LA SEMANA:

¿De qué modo reaccionó Jonás ante el asombroso arrepentimiento de los ninivitas? ¿Cómo era Jonás, que hacía que su actitud fuera aún más repelente? ¿Cuál era el problema de este profeta? Por su actitud, ¿a quién estaba imitando Jonás? ¿Qué nos revela esta historia acerca de la gracia de Dios y acerca de nuestras limitaciones humanas para entender completamente esa gracia?

JONÁS HABÍA COMPLETADO una misión de predicación con todo éxito. Los ciudadanos de Nínive, la capital de Asiria, desde el menor hasta el mayor, aceptaron el mensaje de juicio y se volvieron arrepentidos al Dios del cielo. Jonás podía ahora volverse a su casa, lleno de gozo y gratitud por el gran poder de Dios para cambiar aun los violentos corazones malvados de los paganos. Esto es lo que podríamos esperar. Pero el libro de Jonás tiene todavía más sorpresas.

En todo el libro de Jonás, Dios tiene muchos más problemas con su profeta que con las personas más disolutas del mundo pagano. En el capítulo 3, así como en el capítulo 1, Jonás termina muy abajo en una escala de comparación con los paganos con los que se ha encontrado. En el primer capítulo, los marineros y su capitán perciben el poder de Dios en la tormenta, y lo adoran. Los malvados ninivitas, en el capítulo 3, reaccionan con arrepentimiento a la proclamación del castigo de Dios. Jonás obedece a Dios sólo después de haber pasado por medidas extremas adoptadas por Dios. Aun el rey pagano humildemente se somete a la autoridad soberana de Dios, reconociendo que Dios no está obligado a salvar a la ciudad (Jonás 3:9). Pero Jonás abusa de la misericordia de Dios.


REACCIÓN INESPERADA

Uno de los versículos más inesperados de las Escrituras es el de Jonás 4:1. En hebreo, el texto dice: “Y fue malo para Jonás, un grande mal, y él estaba furioso por causa de ello”. ¿Furioso por qué? ¿Cuál era este “grande mal”? Era que los ninivitas se habían convertido de su pecado y violencia, y por lo tanto, el juicio que iba a caer sobre ellos no sucedió. Eso era el “grande mal”.

Imagínate a un evangelista que celebra una serie de reuniones en una ciudad conocida por su maldad, y luego se deprime cuando toda la ciudad se convierte y acepta el mensaje.

¿Qué ocurrió allí? ¿Por qué Jonás se habrá sentido así? Tal vez él sintió que esos malvados asirios habían hecho tanto mal que merecían el castigo y que extenderles la gracia de Dios era una violación de las formas básicas de la justicia. Tal vez sintiéndose muy nacionalista, quería que el juicio de Dios cayera sobre esos paganos. Tal vez pensó que por cuanto no había caído el castigo de Dios, se lo consideraría un profeta falso. Cualquiera que haya sido la razón, la situación era esta: Un profeta de Dios está enojado porque Dios ha mostrado misericordia a personas arrepentidas. Es difícil imaginar un pecado peor.

Por mala que haya sido la reacción del profeta, ¿qué le había ocurrido recientemente a él, personalmente, que hizo que su reacción fuera aún peor? Ver Jonás 1:17-2:10.

______________________________________________________________________

______________________________________________________________________


Tal vez una de las lecciones más importantes que podemos aprender de la reacción de Jonás es que ella revela, de una manera muy particular, la gracia de Dios, no como fue expresada sólo a los ninivitas (aunque lo fue), sino la que se le extendió a Jonás. Dios conocía el corazón de Jonás, sabía cómo reaccionaría, y de todas maneras lo escogió y seguía dispuesto a trabajar con él, a pesar de su mala actitud. En toda la Biblia, vemos este principio.

Lee los siguientes textos. Haz una lista de las fallas de carácter que revelan: Génesis 9:20, 21; Génesis 16:1-4; Números 20:11, 12; 2 Samuel 11:4; Mateo 11:3; Hechos 15:35; y Gálatas 2:11-14. ¿Qué otra cosa nos dicen acerca de la disposición de Dios a trabajar en nosotros, y aun usarnos a pesar de nuestras fallas, como lo hizo con Jonás?

EL PECADO DE JONÁS (Jonás 4:2)


La primera vez que vemos que Jonás ora sucede en el vientre del gran pez, cuando pidió liberación de la destrucción; la siguiente vez que lo vemos orando aparece aquí en el capítulo 4, donde está enojado porque Dios libró a otros de la destrucción. ¡Qué hipocresía!

Básicamente, Jonás estaba diciendo que la razón por la que no quería ir a Nínive fue que él sabía que Dios era misericordioso. De este modo, está confesando abiertamente que no quería que Dios protegiera a esa gente. Si eso no fuera suficientemente sorprendente, Dios, conociendo su actitud, lo usó de todos modos. Ciertamente, la gracia de Dios es mayor que lo que piensa la sabiduría humana.

Considera lo que Jonás afirma que es el carácter de Dios (Jonás 4:2). ¿Cuáles son los atributos que aquí señala? (Ver también Éxodo 34:6, 7; Joel 2:13; Números 14:18; Salmo 86:15). ¿Cuál es aquí la gran ironía en su confesión? ¿Quién, de muchas maneras, recibió más gracia, misericordia y bondad de parte de Dios: Jonás o los ninivitas? En las líneas siguientes, anota cada característica que menciona Jonás acerca de Dios, y luego, en tus propias palabras, describe lo que crees que significa cada una de ellas.

______________________________________________________________________

______________________________________________________________________

______________________________________________________________________

______________________________________________________________________


Para los cristianos, el concepto de la misericordia, la gracia y la paciencia de Dios no son sencillamente doctrinas teológicas. Deberían ser parte de la experiencia de lo que significa ser cristiano, de lo que significa caminar con Dios. Después de todo, si tenemos una relación con Dios, si amamos a este Dios, deberíamos haber experimentado, por nosotros mismos, cómo son su misericordia, su gracia y su paciencia.

¿De qué modo has experimentado estos aspectos del carácter de Dios en tu propia vida? ¿Qué clase de testimonio personal podrías dar acerca de la realidad de estos atributos de Dios?

EL MISTERIO DE LA GRACIA DE DIOS

Lo que vemos en Jonás es un pequeño ejemplo de cuán limitada es la comprensión humana de la gracia de Dios, la que —en su máxima expresión— fue revelada en la cruz. ¿De qué modo podemos nosotros, como seres humanos, comprender el amor de un Dios que estuvo dispuesto a morir por seres que son tan pequeñitos, aunque sea en un sentido físico, dentro de su creación? No podemos entenderlo, por lo menos plenamente; por eso tenemos que 1) experimentarlo nosotros mismos, y 2) aceptarlo por fe.

En el contexto de Jesús, de su muerte que provee una expiación suficiente para todo el mundo, algo que los hombres modernos, que viven en la era científica, ya no pueden tomar seriamente, Richard Tarnas escribió: “El hecho mismo de que toda la cadena de eventos fuera tan improbable estaba llegando a ser dolorosamente obvio: que un Dios infinito y eterno repentinamente haya llegado a ser un ser humano específico, en un momento y en un lugar histórico específicos, para ser ignominiosamente ejecutado. Que una sola vida breve, que ocurrió hace dos mil años en una nación primitiva y oscura, sobre un planeta que ahora se sabe que es un trozo insignificante de materia que gira alrededor de una de los miles de millones de estrellas en un universo inconcebiblemente vasto e impersonal, que un evento tan poco distinguible tuviera un significado cósmico o eterno, ya no puede ser una creencia aceptable para los hombres razonables. Era claramente poco creíble que el universo como un todo tuviera algún interés definido en esta pequeña partícula de la inmensidad, si es que tenía siquiera algún ‘interés’ ”.–Richard Tarnas, p. 305.

En contraste, Elena de White escribió: “Resultará útil contemplar la condescendencia divina, su sacrificio, la negación propia, la humillación y la resistencia que el Hijo de Dios encontró al realizar su obra en favor del hombre caído. Al contemplar sus sufrimientos, cuán bueno es exclamar: ¡Maravillosa condescendencia! Los ángeles se maravillaban, cuando con intenso interés observaban al Hijo de Dios descender, paso a paso, el sendero de la humillación. Es el misterio de la piedad. Es la gloria de Dios esconderse a sí mismo y sus caminos, no manteniendo al hombre en la ignorancia de la luz y el conocimiento celestiales, sino sobrepasando la máxima capacidad que tiene el hombre de conocer. La humanidad puede comprender esto sólo en parte, pero eso es todo lo que el hombre puede soportar. El amor de Cristo sobrepuja el conocimiento. El misterio de la redención seguirá siendo el misterio, la ciencia inagotable y el canto permanente por la eternidad. Bien puede la humanidad exclamar: ¿Quién puede conocer a Dios?”.–The Bible Echo (30 de abril de 1894).

Usando los siguientes versículos, y otros que puedas encontrar que sean relevantes, así como la cita de Elena de White transcrita arriba, escribe un párrafo respondiendo el desafío del Sr. Tarnas a la fe cristiana: 1 Corintios 2:7; 3:19; Efesios 3:9: Colosenses 2:2; Filipenses 4:7; 1 Juan 4:10.


¿ES DIOS TAMBIÉN MISERICORDIOSO?

Aparentemente, no es sólo un hombre moderno como Richard Tarnas el que tiene dificultades en comprender la gracia de Dios: también las tenía el pobre Jonás; y esa es la razón por la que él no quería predicar en Nínive. No deseaba que ellos recibieran algo que no merecían. Pero de eso se trata siempre la gracia de Dios: recibir algo que no merecemos.

Después que Israel cayó en la gran apostasía del becerro de oro en el desierto, el Señor proclamó ante él una de las primeras expresiones de la profunda y amorosa gracia de Dios (ver Éxodo 34:6). En ese momento, Dios podría, legítimamente, haber abandonado a su pueblo.

Lee, en Éxodo 32 la historia del becerro de oro. ¿De qué maneras su culpa era aún peor que la de los ninivitas? Contrasta la actitud de Moisés con la de Jonás. ¿Cuál puede haber sido la causa de esa profunda diferencia?

______________________________________________________________________


Aun cuando Jonás estaba agradecido por la misericordia de Dios hacia él, sin embargo, estaba molesto porque esos mismos maravillosos atributos llenos de gracia eran compartidos con un pueblo malvado como el de los ninivitas. Ahora él critica duramente estas cualidades divinas de la gracia y la longanimidad. Piensa que Dios debería reservar la salvación sólo para los justos, y que el castigo debería ser el destino de los malvados.

¿Quién más manifiesta la misma clase de espíritu que demostró Jonás? Ver Zacarías 3:1-7; Apocalipsis 12:10. ¿De qué manera nos ayuda esto a ver cuán necia fue la actitud de Jonás?

Jonás ve como un error la postergación del castigo de Nínive. Él desaprueba enfáticamente el hecho de que Dios comparta su compasión con estas personas. ¡Su razonamiento revela la forma en que él pensaba que podía gobernar al mundo mejor que Dios mismo! En definitiva, la razón de Jonás para huir de la comisión divina no tenía tanto que ver con los viles pecadores de Nínive como con el carácter de Dios.

Sin embargo, los impíos ninivitas realmente no eran diferentes de Jonás. Todos los ninivitas y Jonás eran pecadores rebeldes que merecían ser castigados. Sin embargo, en su misericordia Dios había decidido mostrar gracia a todos ellos. Jonás estaba dispuesto a aceptar esa misericordia para sí mismo, pero no para los ninivitas.

Gustavo tenía un hermano no creyente que había sido asesinado por un hombre que fue enviado a la cárcel. Allí, el asesino se convirtió. Sin embargo, Gustavo lucha con lo que él cree que es una gran injusticia: la salvación de un homicida y la muerte de su hermano. ¿De qué modo responderías a sus preguntas acerca de la equidad de Dios en esta situación?

LA PACIENCIA DE DIOS CON JONÁS

¿De qué manera Dios le habla a Jonás, cuando el profeta, molesto por la misericordia de Dios, pide la muerte? Jonás 4:4.

El Dios de Jonás, misericordioso y lleno de gracia, le dirige una pregunta escrutadora. Con sólo tres palabras en hebreo, Dios le pide a Jonás que reconsidere su pedido.

Compara y contrasta lo que Dios le dice a Jonás en el versículo 4, con lo que le dijo a Caín (Génesis 4:6). En relación con los problemas, ¿cuáles son las semejanzas en ambos incidentes?

______________________________________________________________________

______________________________________________________________________

La respuesta de Dios a Jonás es sorprendentemente suave. Él anhela que Jonás vuelva a sus sentidos y vea cuán infantil es su conducta. Una de las metas principales de Dios parece ser la de ayudar a esta persona obstinada a llegar a ser un creyente más maduro. A la luz de esta sorprendente conversación con Jonás, en el capítulo 4, esta meta parece tan importante para Dios como lo fue la salvación de Nínive. Dios desafía a Jonás a reflexionar acerca de su reacción y a analizar su modo de pensar. Dios le está sugiriendo bondadosamente que tal vez está equivocado en su estimación de la situación.

Jonás no es la única persona en las Escrituras que se ha sentido molesta por los caminos de Dios.

¿Qué otros personajes bíblicos experimentaron profunda agonía mientras trataban de luchar con los caminos de Dios? Job 7:17-21; Jeremías 15:15-18. ¿Cuál es la esencia de sus quejas, y de qué modo estas quejas son diferentes de la de Jonás?

Lee también Lucas 9:52-56. Compara lo que ocurrió allí con lo que ocurrió con Jonás aquí en el capítulo 4.

Ninguna otra nación, en conjunto, alguna vez luchó con Dios con la misma profundidad o intensidad que Israel. A lo largo de todo el Antiguo Testamento hay un rico tapiz de tales encuentros que muestran ira, desesperación y angustia. El libro de los Salmos es una colección notable de tales luchas.

Aunque los cristianos hoy prefieren los salmos de alabanza, muchos de los ciento cincuenta salmos están llenos de dolor y de protestas. Y recuerda que estos salmos incluso fueron cantados por los israelitas durante los cultos de adoración. La intensidad de la relación del pueblo con Dios, en el Antiguo Testamento, les parece irreverente a algunos, ahora. Pero, tal vez, es más un asunto de la propia inmadurez de nuestra relación con Dios. Dios no regaña a los creyentes que sufren. En realidad, siempre muestra un asombroso respeto por esas expresiones, incluyendo las de Jonás. Dios evidentemente valora la honestidad en nuestra relación con él. No tenemos que negar la realidad cuando oramos a Dios.

PARA ESTUDIAR Y MEDITAR

“Hay misterios en el plan de la redención […] [ellos] constituyen temas de continuo asombro para los ángeles celestiales. El apóstol Pedro, hablando de la revelación dada a los profetas en cuanto a ‘las aflicciones que habían de venir a Cristo, y las glorias después de ellas’, dice que son cosas ‘en las cuales desean mirar los ángeles’ (1 Pedro 1:11, 12)” (2 JT 307).

Elena de White analiza con elocuencia estos problemas de la justicia y la misericordia de Dios tal como se observan en la historia de Israel.

Con respecto al ministerio de Jeremías, dice: “Estas palabras demuestran vívidamente la poca voluntad que tiene el Señor para castigar. Retiene sus juicios para suplicar a los impenitentes. El que ejerce ‘misericordia, juicio y justicia en la tierra’ (Jeremías 9:24), siente profundos anhelos por sus hijos errantes; y de toda manera posible procura enseñarles el camino de la vida eterna. Había sacado a los israelitas de la servidumbre para que lo sirvieran a él, único Dios verdadero y viviente. Aunque durante mucho tiempo se habían extraviado en la idolatría y habían despreciado sus amonestaciones, les declara ahora su buena voluntad para postergar el castigo y para darles otra oportunidad de arrepentirse” (PR 304).

“Una vez más cedió a su inclinación a dudar, y una vez más fue abrumado por el desaliento. Perdiendo de vista los intereses ajenos, y dominado por el sentimiento de que era preferible morir antes que ver sobrevivir la ciudad, [Jonás] exclamó, en su disconformidad: ‘Ahora, pues, oh Jehová, ruégote que me mates; porque mejor me es la muerte que la vida’ ” (PR 203).

PREGUNTAS PARA DIALOGAR

1. Estudia la parábola que se halla en Mateo 18:23 al 35. ¿Cómo la entiendes, en contraste con lo que hasta ahora ha estado ocurriendo en Jonás?

2. Lee el Salmo 10. ¿Qué está ocurriendo allí, y cómo puede explicarse en el contexto de lo que ocurrió en lo que hemos estudiado hasta aquí en Jonás?

El escritor y creyente cristiano Blas Pascal escribió una vez que “el corazón tiene sus razones que la razón no entiende”. ¿Qué crees que quiso decir con esto? ¿Estás de acuerdo con él? ¿De qué manera un pensamiento como este encuadra en la fe cristiana?

RESUMEN

Jonás tiene muchas lecciones que aprender acerca del amor y la misericordia del Dios al que profesa servir.

                                                                                                                                                 

Categorías: La Deidad

0 comentarios

Deja una respuesta

Marcador de posición del avatar

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *