El Bautismo – 3ra. Parte
V. El bautismo en los escritos joaninos
Resulta difícil determinar la concepción de Juan respecto al
bautismo, desde el momento en que el rico simbolismo del evangelio se presta
a distintas interpretaciones.Algunos creen observar alusiones sacramentales
en todo el evangelio (en cada referencia al “agua”). Otros sostienen
que Juan es antisacramentalista (p. ej. 6.63 como limitación de cualquier
alusión a la Cena del Señor en 6.51–58).
En Jn. 3.5 (“[nacidos] de agua y del Espíritu”, la referencia
más probable al bautismo) se considera que el comienzo de una nueva
vida en Cristo surge ya sea del bautismo en agua y el don/poder del Espíritu;
o del poder purificador y renovador del Espíritu (cf. Is. 44.3–5;
Ez. 36.25–27); o que posiblemente requiera el nacimiento del Espíritu
(3.3, 6–8) además del nacimiento natural (3.4). Sin embargo,
el pensamiento dominante es claramente la obra del Espíritu, y en vista
del contraste entre el bautísmo en agua y el bautisno en el Espíritu
en 1.33, deberíamos evitar la sustitución de la expresión
“nacidos de(l)” en 3.5 por “bautizados en”. No hay
indicación alguna de la existencia de una equivalencia entre el bautismo
y el nuevo nacimiento para ninguno de los escritores del NT (cf. Stg. 1.18;
1 P. 1.3, 23; 1 Jn. 3.9).
En otros pasajes de Juan el vocablo “agua” probablemente simboliza
ya sea el Espíritu Santo dado por Jesús (4.10–14; 7.37–39;
19.34, la única otra alusión plausible al bautismo), o la era
antigua en contraste con la nueva (1.26, 31, 33; 2.6ss; 3.23–36; 5.2–9).
En 1 Jn. 5.6–8 “agua” se refiere al bautismo de Jesús
mismo como testimonio permanente de la realidad de su encarnación.
VI. El bautismo de párvulos
¿Se habrá practicado el bautismo de párvulos en el 1º
siglo del cristianismo? No hay ninguna referencia directa al bautismo de párvulos
en el NT, pero la posibilidad de que haya habido niños en las familias
bautizadas en Hch. 16.15, 33; 18.8 y 1 Co. 1.16 no puede ser terminantemente
excluida. Sobre la base de 1 Co. 7.14, sin hablar de Mr. 10.13–16, se
puede sostener que los hijos pequeños de los creyentes constituyen
parte de la familia de la fe. Por otro lado, en Gá. 3 Pablo sostiene
específicamente que la unión con Cristo no deriva de ninguna
descendencia física, ni depende tampoco de ningún acto ritual
(circuncisión), sino que se realiza por medio de la fe, y que no depende
de ninguna otra cosa que no sea la fe y el don del Espiritu que se recibe
por fe.
En resumen, cuanto más se entienda al bautismo como la expresión
de la fe del que se bautiza, tanto menos se puede aceptar el bautismo de párvulos;
mientras que cuanto más se entienda al bautismo como la expresión
de la gracia divina, tanto más fácil resulta sostener la procedencia
del bautismo de párvulos. De cualquier manera, los cristianos deben
cuidarse de dar más importancia de lo debido al bautismo, para no caer
en el error de los judaizantes que daban indebida importancia a la circuncisión.
(* Sepultura; * Circuncisión; * Fe; * Juicio; * Imposicion de manos;
* Arrepentimiento; * Sacramento; * Espiritu; * Agua )
Bibliografía. °J. D. G. Dunn, Bautismo en el
Espiritu Santo; P. Marcel, El bautismo: Sacramento del pacto de gracia, 1968;
G. R. Beasley-Murray, “Bautismo”, °DTNT, t(t). I, pp. 160–172.
K. Aland, Did the Early Church Baptize Infants?, 1963; J. Baillie, Baptism
and Conversion, 1964; K. Barth, Church Dogmatics, IV/4, 1970; G. R, Beasley-Murray,
Baptism in the New Testament, 1962; Baptism Today and Tomorrow, 1966; C. Buchanan,
A Case for Infant Baptism, 1973; J. D. G. Dunn, Baptism in the Holy Spirit,
1970; A. George, et. al., Baptism in the New Testament, 1964; J. Jeremias,
Infant Baptism in the First Four Centuries, 1960; The Origins of Infant Baptism,
1963; G. W. H. Lampe, The Seal of the Spirit, 1967; J. Murray, Christian Baptism,
1962; J. K. Parratt, Holy Spirit and Baptism, ExpT 82, 1970–71, pp.
231–235, 266–271; A. Schmemann, Of Water and the Spirit, 1976;
R. Schnackenburg, Baptism in the Thought of St Paul, 1964; G.Wagner, Pauline
Baptism and the Pagan Mysteries, 1967; G. Wainwright, Christian Initiation,
1969; G. R. Beasley-Murray, R. T. Beckwith, en NIDNTT 1, pp. 143–161
0 comentarios