El Don de Lenguas – Parte 3 (b): Función Teológica
Entraremos ahora a estudiar un
poco la Doctrina de la Evidencia. ¿Cómo es que los Pentecostales
definen la Evidencia del Espíritu Santo?
Ellos dicen que una persona fue bautizada en el Espíritu Santo, cuando
esta persona pasa a hablar lenguas. El Don de Lenguas pasa entonces a ser
evidencia de que esa persona fue realmente bautizada en el Espíritu
Santo.
Ellos aún hacen una pequeña distinción en el hecho de
hablar lenguas. Ellos dicen que existen dos dones de lenguas:
1.- Ellos llaman el primer Don de "señal". Con esto ellos quieren decir que cuando una persona habla lenguas por la primera vez, ella está recibiendo la "señal" del Espíritu Santo. A partir de ese día, ella está bautizada en el Espíritu Santo. La "señal" sería la prueba de que ella fue realmente bautizada. Ellos aun dicen, que este "señal" no precisa ser interpretado, porque es apenas una señal de que Dios finalmente aceptó esa persona como hijo Suyo. Ellos dicen que esta señal es para esa persona en particular. Ella es la única beneficiada con el recibimiento del Espíritu Santo. Por lo tanto, no precisa de interpretación.
2.-Ellos llaman el segundo Don exactamente de "don". Cuando una persona ya recibió la "señal", y posteriormente, esa misma persona pasa a hablar lenguas nuevamente, entonces este es el Don de hablar lenguas legítimo. Este si precisa ser interpretado, porque ahora ya no es apenas una señal para la propia persona, sino que es un mensaje del Espíritu Santo para toda la iglesia, o para algunos miembros de ella. Por eso precisa de interpretación.
En la Biblia no encontramos ningún
pasaje que nos dé subsidios para poder apoyar esta doctrina. Sería
bueno aquí, hacer resaltar que los Pentecostales basan sus Doctrinas
del Don de Lenguas, casi que exclusivamente en el libro de Hechos. Vamos entonces
a dar una pequeña estudiada en ese libro. Vamos a tratar de establecer
con la mayor seguridad posible, cuántos bautismos hubo en el libro
de Hechos, y cuantas veces es citado el hecho que los bautizados hayan hablado
lenguas.
El número exacto de bautismos que aparecen en el libro de Hechos, no
puede ser establecido exactamente, porque al-gunos pasajes no están
expresados tan claramente como nos gustaría a todos; fuera de eso,
va a depender un poco también de la versión de la Biblia que
usted esté usando. Acuérdese que la palabra Bautismo y la palabra
Lleno, son usadas en la Biblia como sinónimos. Yo leí el libro
de Hechos entero, y encontré los siguientes pasajes como siendo idóneos
para esta investigación:
1.- Hechos 2:4
2.- Hechos 2:41
3.- Hechos 2:47
4.- Hechos 4:4
5.- Hechos 4:32-33
6.- Hechos 5:14
7.- Hechos 6:1
8.- Hechos 6:7
9.- Hechos 8:12-13
10.- Hechos 8:15-17
11.- Hechos 8:38-39
12.- Hechos 9:31
13.- Hechos 9:35
14.- Hechos 10:44-47
15.- Hechos 11:21,24
16.- Hechos 14:21
17.- Hechos 16:33
18.- Hechos 17:4
19.- Hechos 17:12
20.- Hechos 17:34
21.- Hechos 18:8
22.- Hechos 19:6
Tenemos aquí una lista,
que podrá variar un poco de lector para lector, de aproximadamente
22 casos, donde personas fueron convertidas a Cristo, y naturalmente deben
haber sido bautizadas. De entre todos estos pasajes, APENAS 3 dicen que los
envueltos hablaron lenguas!
¿Indica esto, por acaso, que en los otros 19 casos, las personas envueltas
no estaban aun preparadas para recibir el Espíritu Santo ? ¿O
entonces, deberíamos concluir que, en 19 casos, miles de personas recibieron
APENAS a Cristo, y en apenas 3 casos el Espíritu Santo fue otorgado
como el Don del VERDADERO bautismo?
¿Pueden existir DISCÍPULOS sin ser bautizados en el Espíritu
Santo? Lea nuevamente Hechos 6:1 y 6:7. En Hechos 8:12-13 dice que Simón
"acompañaba a Felipe cerca, observando EXTASIADO las señales
y grandes milagros practicados". ¿Quiere decir esto que fueron
hechos grandes SEÑALES y MILAGROS sin la presencia del Espíritu
Santo ? O entonces, todo esto fue hecho CONTRA la voluntad del Espíritu
Santo?
Ahora lea atentamente Hechos 8:14-17! En el versículo 17 dice: "Entonces
les imponía las manos, y RECIBÍAN ESTOS EL ESPÍRITU SANTO".
Aquí nos es dicho categóricamente que esas personas RECIBIERON
el Espíritu Santo; pero no dice NADA en absoluto, sobre haber hablado
lenguas!
En Hechos 9:31 dice que la iglesia caminaba "fortalecidas por el Espíritu
Santo, CRECIA en número". Si la iglesia estaba caminando fortalecidas
por el Espíritu Santo, y crecía en número, por qué
no dice nada a respecto de hablar lenguas ?
En Hechos 11:21 dice que "la mano del SEÑOR estaba con ellos,
y muchos, CREYENDO, se CONVIRTIERON AL SEÑOR". ¿Quiere
decir esto, que esta fue una conversión "parcial" ? La Biblia
dice que la propia mano del Señor estaba con ellos, pero aun así
no fue suficiente, ya que no hablaron lenguas ?
Según los Pentecostales, solamente tres bautismos fueron genuinos,
porque hablaron lenguas. ¿Será que esta Doctrina de la Evidencia
está correcta ?
Vimos una serie de pasajes en el libro de Hechos, y podemos concluir que no
hay una consistencia, una igualdad, o aun, una continuidad en las experiencias
aquí relatadas. El Espíritu Santo viene, pero los resultados
son bastante diferentes. Los resultados de la presencia del Espíritu
Santo NO SON PREVISIBLES!!!
Nosotros no podemos encajonar la acción del Espíritu Santo,
de acuerdo con NUESTRA voluntad. Dios actúa en las personas como El
encuentre que va a ser mejor para nosotros seres humanos pecadores y destituidos
completamente de Su justicia y gracia. Concluimos entonces, que no hay un
PADRON en el libro de Hechos, en el cual nos podamos basar para llegar a una
conclusión inequívoca y que el hecho de hablar lenguas, sea
realmente una EVIDENCIA de haber recibido el Espíritu Santo.
Por otro lado, hallamos que el hecho de hablar lenguas, no puede ser una evidencia
del Bautismo en el Espíritu Santo, porque Satanás también
puede hacer con que algunas personas vengan a hablar lenguas. Nosotros creemos
que cuando el Espíritu Santo viene y habita en esa persona, porque
esa persona hizo una ENTREGA TOTAL a Jesús Cristo, entonces esa misma
persona va a pasar a mostrar los FRUTOS del Espíritu Santo, o mejor
aun, la OBRA del Espíritu Santo. Y la OBRA del Espíritu Santo,
NUNCA será imitada por Satanás. Esta es ciertamente la mayor
y mejor garantía que podemos tener.
Antes de analizar la obra del
Espíritu Santo, me gustaría recordarles que la Biblia es bien
clara al decir que no todos los hombres recibirían los MISMOS DONES.
Leamos primero un pasaje corto, pero aclarador: I Cor. 7:7 = "Quiero
que todos los hombres sean tales como también yo soy; sin embargo cada
uno tiene de Dios su propio don; uno en verdad, de un modo, otro de otro".
Leamos ahora I Cor. 12:4-11. En el versículo 7 dice: "La manifestación
del Espíritu es CONCEDIDA a cada uno, divisando un fin PROVECHOSO".
En los versículos 8 hasta 10, cita algunos de los Dones, donde realmente
aparece el Don de Lenguas y la capacidad para interpretarlas. Pero aparece
en último lugar. Y finalmente en el versículo 11 dice lo siguiente
= "Pero uno solo y el MISMO Espíritu realiza TODAS estas cosas,
distribuyéndolas, como LE COMPLACE, a cada uno, individualmente".
Si el Espíritu Santo distribuye todos estos Dones, incluyendo el Don
de Lenguas, como Le complace a cada uno individualmente, entonces definitivamente
el hablar lenguas no puede ser la evidencia de alguien haber recibido ese
mismo Espíritu. No podemos OBLIGAR al Espíritu Santo a hacer
algo que El no quiere hacer. La Biblia dice claramente que El distribuye esos
Dones de acuerdo con la OBRA que El tiene para hacer, y no para satisfacer
doctrinas humanas.
Volvamos entonces a analizar ahora cuál es la obra del Espíritu
Santo. Vea primeramente, la siguiente definición dada por Dr. Wilson
Endruveit: "La evidencia de la presencia del Espíritu Santo es
tan amplia cuanto Su Obra". Donde el Espíritu Santo actúa,
El deja evidencias claras y distintas de Su Obra. Arrepentimiento, conciencia
del pecado, vidas transformadas, amor por el prójimo, aprender a perdonar,
aprender a orar, etc.,etc.. Esto el Espíritu Santo coloca en nuestras
mentes y corazones. La Biblia expresa esto de diversas maneras. Pero vamos
a escoger apenas tres versículos que nos van a llevar a una conclusión
maravillosa. Vamos a leer Juan 14:26; Juan 15:26 y Juan 16:13. ¿Qué
nos enseña la Biblia aquí? Que el CENTRO de la Obra del Espíritu
Santo es Cristo!!! El Espíritu Santo nos lleva a Cristo. Esto contradice
totalmente la Doctrina de la Subsecuencia que los Pentecostales Carismáticos
defienden. Es el Espíritu Santo que nos lleva a Cristo, y no Cristo
al Espíritu Santo.
Sugiero al querido lector, que lea el capítulo 30 de El Gran Conflicto.
De ese capítulo vamos extraer el siguiente texto: "Es la gracia
que Cristo IMPLANTA en el alma, que crea en el hombre la enemistad contra
Satanás. Sin esta gracia que convierte, y este PODER RENOVADOR, el
hombre continuaría cautivo de Satanás, como siervo siempre dispuesto
a ejecutarle las órdenes. Pero el nuevo principio en el alma crea el
conflicto donde hasta entonces había paz. El poder que Cristo comunica,
HABILITA el hombre a resistir al tirano y usurpador. Quien quiera que se halle
a aborrecer el pecado en lugar del amor, que resista a esas pasiones que han
dominado interiormente y las venza, EVIDENCIA la OPERACIÓN de un principio
enteramente de ARRIBA." (Página 510).
Podemos ver que sin el Espíritu Santo, el hombre sería enteramente
esclavo de Satanás. Vea la siguiente citación del libro Evangelismo,
en la página 192: "Sin el proceso TRANSFORMADOR que solo puede
venir a través del divino poder, las propensiones originales para el
pecado permanecen en el corazón con toda su fuerza, para forjar nuevas
cadenas, para imponer una esclavitud que nunca puede ser deshecha por la capacidad
humana."
Aconsejo aun al estimado lector, que procure leer el capítulo 5 del
libro Hechos de los Apóstolos, de donde sacaremos ahora algunos trechos:
"Los que en el Pentecostés fueron dotados con poder de arriba,
no quedaron por esto libres de tentaciones y pruebas. En cuanto testimoniaban
de la verdad y de la justicia, eran repetidamente asediados por el enemigo
de toda la verdad, el cual procuraba robarles su EXPERIENCIA CRISTIANA. Eran
compelidos a LUCHAR con todas las facultades dadas por Dios, a fin de alcanzar
la estatura de hombres y mujeres en Cristo Jesús. DIARIAMENTE oraban
por nuevos suplementos de gracia, para que pudiesen subir más y más
en la escala de la perfección. Bajo la operación del Espíritu
Santo, aun los más débiles, por EJERCITAR fe en Dios, aprendían
a mejorar las facultades conseguidas, y a volverse santificados, refinados
y ennoblecidos. Al someterse en humildad a la modeladora influencia del Espíritu
Santo, recibían la PLENITUD de la divinidad y eran MODELADOS a semejanza
de lo divino. El tiempo decorrido no operó NINGUNA modificación
en la promesa dada por Cristo al partir, promesa esta de enviar el Espíritu
Santo como Su representante. No es por cualquier restricción de parte
de Dios que las riquezas de Su gracia no fluyen para la tierra en favor de
los hombres. Si el cumplimiento de la promesa no es visto como podría
ser, es porque la promesa no es APRECIADA como debería ser. Si todos
estuviésemos DISPUESTOS, todos serían LLENOS del Espíritu.
Donde quiera que la necesidad del Espíritu Santo sea un asunto del
que poco se piense, allí habrá SEQUIA espiritual, OSCURIDAD
espiritual y espirituales declino y muerte. Cuando quiera que asuntos de menor
importancia ocupen la atención, el divino poder, PRECISO para el CRECIMIENTO
y PROSPERIDAD de la iglesia, y que habría de traer detrás de
si TODAS las demás bendiciones, está faltando, aun cuando sea
ofrecido en infinita plenitud. Una vez que este es el medio por el cual hemos
de recibir PODER, ¿por qué no sentimos HAMBRE y SED por el Don
del Espíritu ? ¿Por qué no hablamos sobre El, no oramos
por El y no predicamos a su respecto ? El Señor está más
dispuesto a dar el Espíritu Santo a aquellos que lo sirven que los
padres a dar buenos regalos a sus hijos. Cada obrero debía hacer su
petición a Dios por el BAUTISMO DIARIO DEL ESPÍRITU. Grupos
de obreros cristianos se deben reunir para suplicar auxilio especial, sabiduría
celestial, para que sepan cómo planear y ejecutar sabiamente. Especialmente
deben ellos ORAR para que Dios bautice sus embajadores escogidos en los campos
mi-sioneros, con una rica medida de Su Espíritu. La presencia del Espíritu
con los obreros de Dios dará a la proclamación de la verdad
un PODER que ni toda la honra y gloria del mundo le darían.
El Espíritu Santo habita en el consagrado obrero de Dios, donde quiera
que él pueda estar. Las palabras dirigidas a los discípulos
también son dirigidas a nosotros. El Consolador es tanto nuestro cuanto
de ellos. El Espíritu concede la fuerza que sustenta al alma que se
esfuerza y lucha en todas las emergencias, en medio al odio del mundo y al
reconocimiento de sus propios fracasos y errores. En tristezas y aflicciones,
cuando las perspectivas se figuran negras y el futuro aterrador, y nos sentimos
desamparados y solos, es tiempo del Espíritu Santo en respuesta a la
oración de la fe, conceder conforto al corazón.
No es prueba conclusiva de que un hombre es cristiano el manifestar EXTASIS
espirituales bajo circunstancias extraordinarias. Santidad no es ARREBATAMIENTO;
es entera entrega de la voluntad a Dios; es vivir por toda la palabra que
sale de la boca de Dios; es hacer la voluntad de nuestro Padre celestial;
es confiar en Dios en la probación, tanto en las tinieblas como en
la luz; es andar por la fe y no por la vista; es apoyarse en Dios con indiscutible
confianza, descansando en Su amor."
"El Espíritu es dado como agente de regeneración, para
hacer efectiva la salvación operada por la muerte de nuestro Redentor.
El Espíritu está CONSTANTEMENTE buscando atraer la atención
de los hombres para la gran oferta en la cruz del Calvario, a fin de desvendar
al mundo el amor de Dios, y abrir las almas convictas a las preciosidades
de las Escrituras.
Habiendo operado la convicción del pecado, y presentado delante de
la mente la norma de justicia, el Espíritu Santo APARTA las afecciones
de las cosas de esta Tierra, y LLENA el alma con el deseo de santidad. El
los guiará en toda la verdad, declaró el Salvador (Juan 16:13).
Si los hombres se dispusieran a ser moldados, HABRÁ la santificación
de todo el ser. El Espíritu tomará las cosas de Dios y las grabará
en el alma. Por Su poder el camino de la vida se hará tan claro que
nadie errará."
"Y aun hoy Dios está usando Su iglesia para hacer conocido Su
propósito en la Tierra. Hoy los heraldos de la cruz están yendo
de ciudad en ciudad y de tierra en tierra, preparando el camino para el segundo
advenimiento de Cristo. La norma de la ley de Dios está siendo exaltada.
El Espíritu del Omnipotente está moviendo el corazón
de los hombres, y los que RESPONDEN a esta influencia se hacen testimonios
de Dios y de Su verdad. En muchos lugares pueden ser vistos hombres y mujeres
consagrados comunicando a otros la luz que les iluminó el camino de
la salvación mediante Cristo. Y mientras dejan su luz BRILLAR, como
hicieron los que fueron bautizados con el Espíritu en el día
de Pentecostés, RECIBEN más y más del poder del Espíritu.
Así es la Tierra iluminada con la gloria de Dios.
Por otro lado, hay algunos que en vez de aprovechar sabiamente las oportunidades
presentes, están indolentemente ESPERANDO por alguna ocasión
especial de refrigerio espiritual, por la cual sus habilidades para iluminar
otros sean grandemente aumentadas. Ellos negligencian los deberes y privilegios
del presente y dejan que su luz se apague, mientras esperan un tiempo en que,
sin ningún esfuerzo de su parte, sean hechos los recipientes de bendiciones
especiales, por las cuales sean transformados y hechos aptos para el servicio.
Es cierto que en el tiempo del fin, cuando la causa de Dios en la Tierra esté
casi a terminar, los sinceros esfuerzos desarrollados por consagrados creyentes
bajo la guía del Espíritu Santo, serán acompañados
por especiales manifestaciones del favor divino. Bajo la figura de las lluvias
temprana y tardía, que caen en las tierras orientales al tiempo de
la siembra y de la cosecha, los profetas hebreos predijeron la dotación
de gracia espiritual en medida extraordinaria a la iglesia de Dios. El derramamiento
del Espíritu en los días de los apóstoles fue el comienzo
de la primera lluvia, o temprana, y glorioso fue el resultado. Hasta el fin
del tiempo, la presencia del Espíritu debe ser encontrada con la VERDADERA
iglesia. Al acercarse el fin de la cosecha de la Tierra, una especial concesión
de gracia espiritual es prometida a fin de PREPARAR la iglesia para la venida
del Hijo del hombre. Ese derramamiento del Espíritu es comparado con
la caída de la lluvia tardía; y es por este poder ADICIONAL
que los cristianos deben hacer sus PETICIONES al Señor de la siembra
"en el tiempo de la lluvia tardía". En respuesta, "el
Señor, que hace los relámpagos, les dará lluvia abundante
de aguas". "El hará descender la lluvia, la temprana y la
tardía, en el primer mes." (Zac. 10:1; Joel 12:23). A menos, sin
embargo, que los miembros de la iglesia de Dios estén hoy en VIVA asociación
con la fuente de todo el crecimiento espiritual, NO ESTARÁN PREPARADOS
para el tiempo de la cosecha. A menos que mantengan sus lámparas limpias
y ARDIENDO, dejarán de recibir la gracia adicional en tiempos de especial
necesidad.
Tan solamente los que están a recibir CONSTANTEMENTE nuevos suplimientos
de gracia, tendrán el poder proporcional a su necesidad diaria y su
capacidad de USAR ese poder. En vez de aguardar un tiempo futuro, en que,
mediante un don especial de poder espiritual reciban una habilitación
milagrosa para conquistar almas, se RINDEN DIARIAMENTE a Dios, para que los
haga vasos propios para Su uso. Aprovechan cada día las oportunidades
del servicio que encuentran a su alcance. Diariamente testifican en favor
del Maestro, donde quiera que estén, sea en alguna humilde esfera de
actividad en el hogar, o en algún sector de utilidad pública.
Hay para el consagrado obrero una maravillosa consolación en saber
que aun Cristo, durante Su vida en la Tierra, buscaba DIARIAMENTE Su Padre
en procura de nueva provisión de la necesaria gracia; y salía
de esa comunión con Dios para fortalecer y bendecir a OTROS.
Ved el Hijo de Dios curvado en adoración a Su Padre! Con cuanto sea
el Hijo de Dios, robustece Su fe por medio de la preces, y mediante la comunión
con el Cielo trae a Si mismo fuerza para resistir al mal y ministrar las necesidades
de los hombres. Como el Hermano más viejo de nuestra raza, conoce las
necesidades de los que, cercados de enfermedades y viviendo en un mundo de
pecado y tentación, desean sin embargo servirlo. El sabe que los mensajeros
que encuentra por bien enviar, son hombres débiles y falibles; pero
a todos cuanto se dedican enteramente a Su servicio, promete auxilio di-vino.
Su propio ejemplo es una garantía de que la diligente y perseverante
súplica a Dios con fe – fe que lleva a una ENTERA confianza en El y
CONSAGRACIÓN sin reserva a Su obra – será eficaz en traer a
los hombres el auxilio del Espíritu Santo en la batalla contra el pecado."
(Hechos de los Apóstoles: 49-56).
Vimos aquí un pequeño resumen de la OBRA del Espíritu
Santo. Esto, evidentemente no es todo. El Espíritu de Profecía
está lleno de mensajes maravillosos donde se muestra la Obra del Espíritu
Santo.
El Espíritu Santo convence del pecado (solamente esto ya es un extraordinario
milagro), lleva al arrepentimiento, revela la persona de Cristo, aparta la
persona de los deseos de la carne, graba en nuestra alma las cosas de Dios;
sustenta, anima, aviva, apoya, redarguye, y nunca condena. Donde hay vidas
TRASNFORMADAS, ahí tenemos la EVIDENCIA del Espí-ritu Santo!!!
Donde antes existía un HARAPO, y ahora existe un Hijo de Dios, ahí
hay EVIDENCIA del Espíritu Santo. Hablar lenguas, definitivamente no
es evidencia de una OBRA tan sublime, como la expuesta arriba.
El Espíritu Santo también actuó en el Antiguo Testamento.
Veamos el siguiente trecho del Espíritu de Profecía: "Durante
la era patriarcal la influencia del Espíritu Santo había sido
muchas veces REVELADA de manera muy notable, pero nunca en su PLENITUD. Ahora,
en obediencia a la palabra del Salvador, los discípulos hacían
sus súplicas por ese Don, y en el Cielo Cristo acreció Su intercesión.
El reclamó el Don del Espíritu para que pudiese derramarlo sobre
Su pueblo." (Hechos de los Apóstoles: 37).
Aconsejo aun a los hermanos, a leer el capítulo 73 de El Deseado de
Todas las Gentes: "No se turbe vuestro corazón". De ese capítulo
sacaremos los siguientes trechos: "El Espíritu Santo es el REPRESENTANTE
de Cristo, pero despojado de la personalidad humana, y de ella independiente.
Embarazado con la humanidad, Cristo no podría estar en toda parte en
persona."
Mucho cuidado con interpretar erradamente el trecho arriba. Pena que no tengamos
más tiempo, como para poder analizar un poquito este extraordinario
asunto: la humanidad de Cristo. Existen varios libros sobre este tema. Buscad
y encontraréis.
"En todos los tiempos y lugares,
en todos los dolores y aflicciones, cuando la perspectiva se figura sombría
y lleno de perplejidad el futuro, y nos sentimos desamparados y solos, el
CONSOLADOR será enviado en respuesta a la oración de la fe.
Las circunstancias nos pueden separar de todos los amigos terrestres; ninguna,
sin embargo, ni aun la distancia, nos puede separar del celeste CONSOLADOR.
Donde quiera que estemos, donde quiera que vamos, El se encuentra siempre
a nues-tra derecha, para APOYAR, SOSTENER, ERGUER y ANIMAR."
Tratamos de mostrar aquí, una pequeña parte de la gran Obra
del Espíritu Santo, y cómo esta se transforma en Su evidencia
en los hombres. Me gustaría aun recomendar a los lectores, el pequeño
libro "Mary entre los Salvajes del Calabar". En ese librito usted
encontrará muchas maneras por las cuales el Espíritu Santo actuó
en una pequeña y gran mujer en el África. Una evidencia salta
a la vista inmediatamente: VIDAS TRANSFORMADAS.
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