Entrevista con Lucifer
por Richard O’Ffill
En 1942 el escritor prolífico C.S. Lewis escribió las famosas cartas tipo ‘screwtape’. Estas cartas representan una correspondencia imaginaria de un demonio a otro. En este sermón voy a descifrar este tema. Pero en vez de imaginarnos un demonio escribiendo a otro, más bien nos vamos a imaginar al diablo tratando de desarrollar una buena imagen de sí mismo, y para ello llama a uno de sus diablillos desde su Departamento de Relaciones Públicas para hacer una entrevista.
La razón por la cual lo estoy haciendo como una entrevista imaginaria es porque mucho de lo que consideramos ser verdadero, depende de quien lo estamos escuchando. Hay muchas cosas que escuchamos hoy en día en el área de fe y moral, y desafortunadamente muchos aceptan como valor nominal lo que está siendo dicho, simplemente porque lo oyeron de personas en quienes confían, o de aquellos que sienten que tienen muy buenas intenciones en su corazón. Cuando Ud. escuche esta entrevista imaginaria, Ud. escuchará cosas que habrá oído antes, pero quizás no habrá considerado las implicaciones que tiene, justamente por la razón que acabo de mencionar. Cuando Ud. escuche los mismos conceptos expresados de una manera imaginaria por uno que nosotros reconocemos como el ‘enemigo de nuestras almas’, ya no le sonará igual que en el pasado.
Yo reconozco que colocar las palabras en la boca del enemigo de nuestras almas, las cuales hemos estado acostumbrados escuchar de una persona amiga o conocida, puede ser considerado como injusto o un acto de mala fe. No es mi propósito rebajar a nadie, sino más bien llevarnos a pensar que hay más de una manera de ver las cosas, y que inclusive aquellas que nos parecen a veces muy amistosas o inclusive muy útiles desde nuestra perspectiva, pueden ser también un arma de doble filo que se torna en contra nuestra cuando está en las manos del enemigo. De esta manera, vamos a escuchar en nuestra imaginación a un diablillo (cuyo nombre es: ‘Malas Noticias’ desde el departamento de Información Pública del diablo) que le hace una entrevista al Jefe.
Tratando de ser lo más profesional posible, ‘Malas Noticias’ comienza su entrevista diciendo: “Hola, ¿así que tú eres el diablo?”
“No”, responde el Jefe, “yo soy Lucifer, el lucero de la mañana”.
Como todo buen reportero, ‘Malas Noticias’ dice aprensivo: “Pero la Biblia dice que tú eres el diablo, la vieja serpiente”.
El Jefe aclara su garganta y continúa: “La verdad es que las personas de la antigüedad quienes escribieron la Biblia eran supersticiosas y necesitaban a alguien para personificar todas las malas cosas que ocurren en el mundo de manera natural. Pero la verdad es que he sido mal representado. Yo no he querido sino el bien para todo el mundo.
‘Malas Noticias’ no va a soltar tan fácil al Jefe: “Pero mira todo lo que has hecho a través de los años”.
“Ese no fui yo”, contesta el Jefe encogiéndose de hombres, “Como tú sabes siempre hay fanáticos. Dios mismo tuvo seguidores fanáticos también.”
Sin embargo, para aparentar estar desinformado, ‘Malas Noticias’ le lleva la contraria, “Pero hemos leído que existe una gran controversia entre Cristo y Satanás”.
El Jefe frunce el ceño: “Mi nombre no es Satanás. Yo soy Lucifer, el hijo de la mañana y además yo nunca hubiera querido que todo esto sucediera. Yo fui expulsado del cielo porque no fui comprendido.
‘Malas Noticias’ hizo su tarea y continúa inquiriendo: “Pero mira qué le hiciste a Jesús. Hemos leído la historia de cómo tu tentaste a Cristo en el desierto.”
Tratando de dar una impresión compasiva y amable el Jefe explica: “Yo no quise ningún daño para él. El no había comido en cuarenta días. Yo sólo estaba tratando de ayudarle a tener más fe.”
‘Malas Noticias’ mira como tratando de entender un acertijo: “Esto es realmente confuso para mí”.
“Es confuso para mí también”, dice el Jefe arqueando una ceja, y su semblante da la impresión como si realmente le importara: “Yo no quiero nada sino el bien para la gente. Yo no quiero que la gente se pierda. Quiero que se salven. Por eso es que estoy promocionando tanto el amor. Inclusive yo mismo quiero ser salvado. Yo pienso que estoy siendo juzgado injustamente. Por eso les digo a las personas que no sólo sean amorosas, sino también preocupadas y compasivas. Yo inclusive le digo que deben hacer el bien los Sábados. Yo inclusive considero que cada uno debe tener una relación con Jesús. Es más, yo mismo tengo relación con él también.”
Esto ahora era una idea nueva. ‘Malas Noticias’ nunca había pensado en ello de ésta manera y dijo abruptamente: “Yo nunca lo había pensado antes, pero tú de veras tienes relación con Jesús. Pero tengo otra pregunta para ti. ¿Cómo te sientes con relación a la Biblia?” El Jefe hace una pausa como buscando las palabras: “¿Cómo me siento con relación a la Biblia? Yo le doy gracias a Dios por la Biblia. ¿Qué haríamos sin la Biblia? Pero yo creo que Dios quiere que entendamos que la Biblia es una historia de lo que ha sucedido en el pasado, sin embargo, opino que podemos aprender mucho de ella, pero debemos entender que las cosas ya no son iguales hoy en día que como fueron en el pasado, y de que necesitamos tomar decisiones en esta época a la luz de nuestro contexto contemporáneo. Después de todo Dios mismo dijo que él no era Dios de los muertos sino de los vivos.”
“¿Qué es lo que estás diciendo?”
El Jefe estira sus hombros. “Repito, opino que la Biblia es importante, pero también pienso que es aún más importante tener una relación con Jesús y dejar que el espíritu guíe. Eso es lo que yo hago.”
‘Malas Noticias’, quien tiene una pequeña grabadora en sus manos, no puede disimular su sorpresa. “Yo apenas puedo creer lo que acabo de oír. Ésto no es lo que ellos decían que tú eres”. El Jefe continúa: “Eso es lo que te estoy diciendo. Yo he sido mal representado. ¿Por qué habría de estar yo en contra de Dios? Ahora yo reconozco que ciertas personas han hecho algunas cosas realmente terribles y decían que yo debería ser culpado, pero eso no es justo. Esto puede sorprenderte, pero para mostrarte dónde está mi corazón, he decidido unirme a la iglesia.”
‘Malas Noticias’ ha estado por mucho tiempo con el Jefe, pero ésta era la primera vez en mucho tiempo que pudo tener una conversación en privado con él. “¿Tu te has unido a la iglesia?” ¿Qué hay de todas esas religiones paganas y de las persecuciones y de todo lo demás?
“Simplemente tendrás que confiar en mi.” El Jefe enfatiza la palabra confiar, y continúa diciendo: “Como te dije antes, han habido cosas en el pasado pero no las hice yo; y además, no estamos viviendo en el pasado. ¿No se supone que debemos perdonar y aceptar? No me importa que me hagas todo este cuestionario, pero con algunas cosas que dices me comienzo a preguntar si no serás un fariseo o un legalista. Por favor no juzgues tanto.”
“Por favor perdóname.” ‘Malas Noticias’ comienza a sentirse incómodo. “¿Decías que te habías unido a la iglesia?”
“Sí.”
“¿Por qué hiciste eso?”
El Jefe se inclina hacia adelante: “Porque creo que podré hacer más bien siendo un miembro de la iglesia que lo que podría hacer sin serlo. Ya tenemos el comienzo del siglo 21 y quiero dedicar mi tiempo y talentos a la iglesia.”
“¿Y qué es lo que intentas hacer, cuál es tu estrategia?” A ‘Malas Noticias’ le gusta la palabra estrategia. Le hace sentirse importante.
“Bueno, en primer lugar, como lo mencioné antes, intento hacer todo lo que esté en mis manos para unir la iglesia. Después de todo Jesús oró para que la iglesia esté unida. Yo creo, sin embargo, que para unir a la iglesia debemos atender las necesidades especiales de los miembros. Uno de mis proyectos especiales es hacer un ministerio con los jóvenes y promover la idea de una iglesia juvenil. Opino que si nos organizamos en grupos separados y celebramos nuestras diversidades y perseveramos en nuestros derechos, esto nos ayudará a todos a ser compasivos y cuidadosos.”
‘Malas Noticias’ quiere asegurarse de haber entendido bien el punto: “¿Así que, si nos separamos en grupos con diferentes especialidades e intereses, seremos más unidos?”
“Sí.”
‘Malas Noticias’ se siente extremadamente complacido. Hasta aquí a pesar de haber pasado por momentos embarazosos, considera que está teniendo una entrevista excelente. “¿Tienes algunas sugerencias de cómo podríamos mejorar nuestro alcance evangelístico? “Claro que sí. Me alegro mucho que preguntes, pues como recordarás, Jesús dijo que él no vino por los justos sino por los pecadores. Yo estoy promoviendo en la actualidad una campaña para alcanzar a los no cristianos. Tu sabes que la sociedad se ha convertido cada vez en más secular, y si la iglesia quiere ser más efectiva tiene que ir a donde la gente está.”
“¿Tienes algunas sugerencias para llevar este plan a cabo?”
“Sí, sí lo tengo.”
“¿Podrías compartir algunas de ellas con nosotros?” ‘Malas Noticias’ está comenzando a emocionarse. Sólo espera a que los demás vean el artículo que él tendrá la posibilidad de publicar. Él está logrando conseguir una tremenda información de grado 33 (verdaderamente confidencial).
Aparentando ser formal, el Jefe comienza: “Gracias. Me encantaría.” Entonces: “Primero déjame decir que podemos aprender muchas cosas del mundo. Tú sabes que la Biblia dice que los niños del mundo son más sabios en su generación, que los niños de Dios. Y por supuesto sabes lo que dice sobre la importancia de la sabiduría, y además, sabemos que toda la verdad, donde quiera que la encuentres, es la verdad de Dios.”
Esa fue una oración larga. ‘Malas Noticias’ considera que necesita aclarar un poco más estos conceptos: “Por favor, sé más específico.”
“Bueno, en primer lugar, podemos aprender mucho de la Avenida Madison (‘Madison Avenue’). La Avenida Madison está llena de ‘anuncios’. Cuando Jesús dijo que debemos ir a todo el mundo y predicar el evangelio, lo que él estaba pidiéndonos – dicho en términos modernos – es ‘anunciar’ el evangelio, y si vamos a anunciar o comercializar algo y queremos ser exitosos, obviamente debemos usar una técnica de comercialización exitosa. Como dicen ellos, todo tiene que ver con el empaque.”
“Ud. Está diciendo entonces”, ‘Malas Noticias’ escoge sus palabras, “¿que la predicación del evangelio tiene que ver con el mercadeo o la comercialización, o como acaba de decir, de cómo lo vamos a empaquetar?”
“Claro. Tú puedes tener un producto muy atractivo, pero si no tiene el empaque adecuado la gente no lo va a comprar. Y por cierto, no es sólo el empaque, sino también cuestión de darle un giro. A veces tendrás que hacer inclusive lo que se le llama un ‘spin doctoring’, o sea, darle un giro a tu producto. (¿? Yasmín, aquí no conozco la expresión en inglés y no sé qué significaría, por esto está traducido literalmente, pero no tiene mucho sentido en castellano).
‘Malas Noticias’ sabe lo que el ‘spin doctoring’ significa. “Pero, ¿no estamos corriendo el riesgo de presentar equivocadamente el evangelio de esa manera?”
“Yo no lo creo. Jesús quiere que se salve a todos los que sea posible. Recuerda que el espíritu de profecía dijo que Jesús se encontró a las personas donde ellas estaban. Eso significa que debemos ser creativos y flexibles en la presentación del mensaje.”
“Tu dices que debemos ser flexibles y creativos. ¿No habrá el riesgo de que en el proceso podríamos alterar el mensaje?” ‘Malas Noticias’ apenas puede creer lo inteligente que suenan sus palabras.
“Siempre existe esa posibilidad, pero debemos recordar que el evangelio puede ser reducido a una sola frase: ‘Cree en el Señor Cristo Jesús y serás salvo’. Yo y aquellas que son mis asociados nunca hemos fallado en creer en Jesús. Pero bueno, estabas preguntando sobre algunas maneras de cómo ser flexibles y creativos. Yo diría que uno de los mejores y más creativos métodos de evangelización y de mayor alcance que se ha logrado en los últimos tiempos, es lo que erróneamente se le ha llamado el ‘Gospel Rock’ (Rock Evangelístico)”
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